El monstruo de colores - The Color Monster
Hoy compartimos una actividad muy reconfortante para mí y mi peque, nuestro propio libro de las emociones, inspirado en el famoso libro El monstruo de Colores. Esta manualidad te permitirá pasar un tiempo de calidad con tu pequeñ@ y hablar sobre las emociones. Podemos hacerles preguntas como ¿Qué te hace sentir molesto? y así con cada una: alegría, tristeza, calma, miedo. Cada emoción puede desencadenar en una conversación interesante con nuestro niños en las que les enseñemos a gestionar sus emociones, lo que no es tarea fácil nisiquiera para mí como adulto (confesiones de madre), pero me hubiera gustado empezar a tener conciencia desde temprana edad.
Los materiales que vamos a necesitar son muy sencillos: cartulinas o papeles de colores (negro, rojo, verde, azul, amarillo), ojos movibles, pegamento, tijeras e imaginación.
Primero recortamos las 2 cartulinas que nos servirán para armar el libro, las doblamos por la mitad y las pegamos al centro. Mientras hacemos esto los pequeños pueden cotar tiras de colores con la tijera, que además es una actividad de motricidad fina. Una vez que tenemos todos los colores que necesitamos para cada monstruo podemos hacerlos lo más divertidos posibles.
Para el miedo enrrollamos tiras finas de color negro y las pegamos de manera desordenada. Lo finalizamos con un solo ojo y las manos y los pies los dibujó Samuel con marcador y también le hizo una expresión de miedo para la boca. Hablamos del miedo a la oscuridad en la noche y los ruidos, de que podemos hablarlo con papá y mamá y que también Dios siempre está con nosotros para cuidarnos.
La calma fueron simples rectángulos verdes, todos los detalles los pegó mi peque así como dibujó brazos piernas y boca. Hablamos de como nos sentimos calmados y relajados cuando oramos y hablamos con Dios.
La Alegría es un sol sonriente y bueno hay muchas cosas que nos hacen sentir alegres como recibir regalos, ir al parque, el amor de papá y mamá y lo bonito que es expresarlo con nuestas palabras y gestos como los abrazos. Por cierto que mamá se siente muy feliz cuando Samu obedece las instrucciones.
Para la tristeza hicimos una gota azul y hablamos del bulling y como no nos gusta cuando nos tratan mal, así que debemos ser amables con los demás. Y cuando alguien o algo nos hace sentir tristes podemos hablarlo con papi y mami.
El enojo o rabia resultó muy artístico porque doblamos las tiras y quedó como una escultura enredada y explosiva. Normalmente las situaciones que desatan berrinches es el tema de los juguetes y tomar turnos, así que podemos enseñarles a pedir las cosas con sus palabras en vez de arrancárselos a los demás niños, a respirar, contar o cualquiera que creas te pueda funcionar porque a veces no es fácil.
Al terminar nuestro libro de emociones estaba tan feliz que se lo enseñó a papá y a la abuela y fue muy interesante verlo explicar todas las emociones y hacerle preguntas a los dos.
Aquí les dejo un video para que vean como nos quedó:
Los materiales que vamos a necesitar son muy sencillos: cartulinas o papeles de colores (negro, rojo, verde, azul, amarillo), ojos movibles, pegamento, tijeras e imaginación.
Primero recortamos las 2 cartulinas que nos servirán para armar el libro, las doblamos por la mitad y las pegamos al centro. Mientras hacemos esto los pequeños pueden cotar tiras de colores con la tijera, que además es una actividad de motricidad fina. Una vez que tenemos todos los colores que necesitamos para cada monstruo podemos hacerlos lo más divertidos posibles.
Para el miedo enrrollamos tiras finas de color negro y las pegamos de manera desordenada. Lo finalizamos con un solo ojo y las manos y los pies los dibujó Samuel con marcador y también le hizo una expresión de miedo para la boca. Hablamos del miedo a la oscuridad en la noche y los ruidos, de que podemos hablarlo con papá y mamá y que también Dios siempre está con nosotros para cuidarnos.
La calma fueron simples rectángulos verdes, todos los detalles los pegó mi peque así como dibujó brazos piernas y boca. Hablamos de como nos sentimos calmados y relajados cuando oramos y hablamos con Dios.
La Alegría es un sol sonriente y bueno hay muchas cosas que nos hacen sentir alegres como recibir regalos, ir al parque, el amor de papá y mamá y lo bonito que es expresarlo con nuestas palabras y gestos como los abrazos. Por cierto que mamá se siente muy feliz cuando Samu obedece las instrucciones.
Para la tristeza hicimos una gota azul y hablamos del bulling y como no nos gusta cuando nos tratan mal, así que debemos ser amables con los demás. Y cuando alguien o algo nos hace sentir tristes podemos hablarlo con papi y mami.
El enojo o rabia resultó muy artístico porque doblamos las tiras y quedó como una escultura enredada y explosiva. Normalmente las situaciones que desatan berrinches es el tema de los juguetes y tomar turnos, así que podemos enseñarles a pedir las cosas con sus palabras en vez de arrancárselos a los demás niños, a respirar, contar o cualquiera que creas te pueda funcionar porque a veces no es fácil.
Al terminar nuestro libro de emociones estaba tan feliz que se lo enseñó a papá y a la abuela y fue muy interesante verlo explicar todas las emociones y hacerle preguntas a los dos.
Aquí les dejo un video para que vean como nos quedó:
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